La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha
emplazado hoy al PP a que se sume al diálogo para alcanzar un nuevo acuerdo de
concertación social y, tras admitir algunos "errores" de pactos
anteriores, se ha comprometido a "cambiar y mejorar" los instrumentos
de control.
"Ya les digo de antemano, porque creo en el diálogo
social, que no pienso abordar esta cuestión para pelearme con nadie, al
contrario, me gustaría que estuviéramos todos, también la oposición de
Andalucía", ha aseverado Díaz en un desayuno-coloquio organizado por
Europa Press Andalucía.
La jefa del Gobierno andaluz, que ha abordado esta cuestión
tanto en la conferencia previa como en el coloquio posterior, ha emplazado al
PP a que decida con carácter "urgente" si quiere "aportar algo
para mejorar las cosas, incluso desde la crítica más profunda, o si prefiere
quedarse practicando la política de tierra quemada".
Díaz ha defendido el diálogo social, aunque ha subrayado que
son necesarios "interlocutores estables y fiables" y que éste se
articule a través de los instrumentos más idóneos.
"Espero que el PP se sume, pero de verdad, necesitamos
que la oposición contribuya, pero que el partido de la oposición coja primero
rumbo o alguien que se ponga al frente y que asuma que lo que es bueno para
Andalucía es bueno para todos", ha señalado.
A su juicio, el estímulo a la actividad empresarial es
"decisivo" para crear empleo, la "gran prioridad" de su
gobierno, y para ello cree "fundamental" la concertación, en la que
hay que "incorporar algunos elementos y corregir otros" porque hay
nuevos "actores" y relaciones laborales que necesitan de
"fórmulas distintas".
"Mi objetivo es buscar pactos sobre nuevas bases, las
que necesita nuestra economía, que ha cambiado", ha matizado Díaz, que ha
agregado que ello hace necesario cambiar también la perspectiva sobre el
diálogo social, sus instrumentos y protagonistas.
Convencida de que hay que propiciar que Andalucía sea un
territorio especialmente "atractivo" para la inversión, ha lanzado un
mensaje -sin nombrarlo expresamente- al socio del gobierno de coalición, al que
ha advertido de que no va a renunciar a que esta comunidad se
"beneficie" de sus recursos, como el sector minero o la construcción.
"No vamos a consentir procesos especulativos como los
de la playa de Valdevaqueros en Tarifa, la finca la Almoraima o Cabo de Gata,
pero ni una cosa ni la otra, tampoco sostener discursos muy bonitos e
ideológicos, pero insostenibles en la práctica", ha resaltado.
Siguiendo con el diálogo social, ha admitido que nada le ha
hecho más "daño" que el "mal uso o uso inadecuado que se haya
podido dar a determinados fondos públicos, naturalmente una mínima parte, pero
hay que poner remedio para que no vuelva a suceder", ha admitido.
Preguntada en el coloquio posterior sobre si UGT le ha
decepcionado, ha remarcado que los sindicatos son necesarios "y, más,
ahora", si bien ha reclamado "firmeza y transparencia".
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